Moda a buen precio y de calidad. Rapidez en la entrega. Sin problemas ni pérdidas.
Probablemente las frases que he escrito arriba describirían perfectamente lo que le pedimos a una tienda on-line de moda cuándo queremos comprar ropa o complementos. Cuándo ese establecimiento on-line es de origen asiático esas exigencias se acentúan.
Os soy sincera, a Dios puse por testigo que no volvería a comprar ni a colaborar con una tienda o portal asiático (podéis leer mis experiencias si buscáis un poco) básicamente porque llegué a la conclusión de que no merecía la pena y no compensaba...a casi nada le saqué provecho y la calidad era aplastantemente pésima (cuidado, siempre hablo por mí misma, mi opinión no debe ni tiene que ser igual a la de otros consumidores) peeeroooo, la tentación llamó a mi puerta con un nombre bastante conocido para las fashion victims: ZAFUL.